En el primer café filosófico dentro de nuestra asignatura, hemos reflexionado sobre un texto de Bertrand Russell. Nos interpelaba sobre la importancia de trabajar nuestro interior frente a la cultura de lo superficial donde predomina lo que él denomina «el hombre práctico».
La reflexión nos ha llevado a profundizar en temas como las modas, la anorexia, la aceptación de uno mismo, el respeto a las diferencias, el valor del cultivo de las emociones y del mundo interno de la persona…
Dos alumnas se han encargado de que la tertulia estuviera amenizada con zumo, batidos y algunas galletitas, ¡parece que el azúcar ha estimulado la reflexión!
Seguiremos con esta interesante experiencia.¡ENHORABUENA CHICAS!